Los enlaces simbólicos (symlinks) son archivos especiales que actúan como accesos directos o referencias a otros archivos o directorios. A diferencia de los accesos directos regulares, los symlinks son transparentes para la mayoría de aplicaciones - cuando accedes a un symlink, el sistema te redirige automáticamente a la ubicación de destino. Funcionan a nivel del sistema de archivos y son compatibles con Windows, macOS y Linux.
Origen es el archivo o directorio original que realmente existe en tu sistema. Aquí es donde tus datos están físicamente almacenados. Destino es donde quieres crear el enlace simbólico - esta es la nueva ruta que apuntará a tu origen. Piénsalo como crear una señal (destino) que apunta a un destino (origen).
Los symlinks son increíblemente útiles para organizar archivos, crear accesos directos a directorios profundamente anidados, enlazar archivos de configuración, gestionar diferentes versiones de software y crear puntos de acceso unificados a contenido distribuido. Son esenciales para desarrolladores, administradores de sistemas y usuarios avanzados que necesitan organización flexible del sistema de archivos.
Enlaces Duros: Referencias directas a datos de archivo (solo mismo sistema de archivos). Junction Points: Enlaces de directorio específicos de Windows. Accesos Directos: Referencias a nivel de aplicación (no transparentes para todos los programas). Bind Mounts: Técnica de montaje Linux/Unix. Cada uno tiene casos de uso específicos, pero los symlinks ofrecen el mejor equilibrio de compatibilidad y funcionalidad entre plataformas.